Ni frio ni calor: GIRLS

¿No os ha pasado nunca que veis algo (una película, una serie, escucháis un disco,...) que no os acaba de gustar pero que de alguna manera os llama a seguir viéndolo? Algo así como un placer culpable pero prácticamente sin rastro de placer... no se si me explico...

Bueno, pues algo así me ha pasado con la serie norteamericana GIRLS, que tiene muchas cosas que me han gustado poco y pocas que me han gustado mucho, y aún así me he tragado los diez capítulos que la conforman a una velocidad pasmosa (para ser yo y para ser una serie que no me interesaba nada).

Empecemos por lo bueno: la música. Como los primeros capítulos de Gossip Girl, estamos ante una serie fresca y moderna, y el envoltorio musical es perfecto. Si queréis estar a la última, aquí tenéis un escaparate perfecto para estarlo. 

Empezamos bien!

Y sigamos con lo malo: la “suciedad” que desprende el producto. La serie es una especie de Sexo en Nueva York pero de chicas veinteañeras, que tiene que empezar a enfrentarse a su vida adulta en un ambiente bastante artístico pero también decadente (en el sentido más estricto de la palabra) donde todo es sucio: las relaciones entre los personajes, las escenas sexuales, las situaciones laborales... de alguna manera la suciedad que desprende todo (acompañada del físico poco agraciado de la protagonista) intenta marcar una contrapartida a otras series más pijas protagonizadas por niñas de papá (y sin duda lo consigue).

Jodó... me has dejao como a un trapo!

Y a todo esto... ¿He hablado de lo mejor y de lo peor de la serie y no de que va? Obviamente, este calor me está afectando a mi rendimiento... Así que vamos a ello: Hannah (Lena Dunham, que aparte de actriz es la creadora de la serie) es una chica fea, gorda y acomplejada que vive con su monísima amiga Marnie. Las dos están en sendas relaciones de pareja, aunque a cual más extraña: Hannah casi no conoce al chico con el que se acuesta, al que solo ve en casa de él y parece no tener demasiado interés por ella, mientras que Marnie está con un novio que es demasiado bueno para ella, y ya no le pone nada. Hannah además acaba de sufrir un ultimatum por parte de sus padres, que deciden cortar el grifo económico con el que ella se sustenta mientras lucha por conseguir su sueño de ser escritora. Junto a estas dos amigas comparten vida Shoshana, una desquiciante chica con un comportamiento un tanto obsesivo y la prima de esta Jessa, una bohemia y liberal que oculta un cierto miedo a madurar. Como podéis ver, todo un retrato del rol femenino de una generación.

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Así pues, estamos ante un producto muy HBO, con todo lo bueno y lo malo que ello conlleva. Se que hay gente que le ha gustado y gente que nada... a mi, sinceramente, me ha gustado poco, aunque al final mejora muchísimo. No se si la seguiré viendo en su segunda temporada (que ya está confirmada).

Me he quedao muerta...